viernes, 24 de julio de 2009

¿Vivir o Sobrevivir?

El fin de semana pasado me fui a Valle de Bravo, un lugar mágico cerca de la Ciudad de México en donde puedes rentar unas cabañas y literalmente hacer nada. De vuelta de una ida al pueblo, me puse a platicar con un amigo sobre la libertad, y sobre como cada ser humano en realidad todos los segundos de su vida elige libremente no morir. El tema salió porque mi amigo mientras manejada comentó sobre la fragilidad de la vida y sobre como una simple acción como dejar el volante podría romperla.

Mientras debatíamos del tema, salió a flote el famoso suicidio, y mientras mas lo pensaba y analizaba me daba cuenta que en efecto, sobrevivir no es una decisión basada en la libertad, es más bien instinto y al menos que te falte algo en el cerebro, el cuerpo humano está hecho para a toda costa no permitirse dejar de respirar.

Dicho esto, puedo decir que aunque no morir es básicamente instinto, vivir sí es una decisión, y solamente podemos vivir cuando nos apasionamos, cuando perdemos y cuando ganamos.
Cuando nos atrevemos y nos dejamos llevar, cuando a cada minuto y a cada respiración estamos tratando de ser lo más que podemos ser, tratando de encontrarle ese sentido a nuestra vida, grande o pequeño que nos lleva a realizarnos como personas.

¡Yo hoy yo decido vivir!

martes, 14 de julio de 2009

El dolor no siempre es sinónimo de Infelicidad

Hace algunos días me dieron una muy buena noticia. Una gran amiga ha dejado la soltería para comprometerse con el amor de su vida, el cual entro hace algunos meses por alguna casualidad del destino.

Recordando años atrás mi amiga estaba a punto de cortarse las venas por un hombre que en realidad no valía la pena (al menos para ella). La hizo sufrir mucho y ella estaba aferrada a el y se rehusaba a olvidarlo.

Mientras mi amiga me contaba lo contenta que estaba y lo maravilloso que era este nuevo hombre y como lo había encontrado, no resistí llorar. Dos razones eran las causantes de ese deseo de explotar en llanto; la primera es que mi amiga estaba inmensamente feliz y eso me hacía inmensamente feliz a mí también, y la segunda, más egoísta y por consiguiente algo mas importante es que mi teoría de que en realidad todo pasa por algo es siempre asertiva. MI amiga sufrió horrible durante un año olvidando al tipo del cual no quiero hablar mal pero que definitivamente no se merecía a mi amiga, pero después de ese año de sufrimiento la recompensa fue buena y mayor.

Muchas veces el camino que nos lleva a conocer a las personas correctas o a las situaciones correctas son dolorosas, y las cosas dolorosas no siempre se tienen que traducir en tristeza y cuando se está triste no significa que estemos infelices simplemente es una época de transición la cual tenemos que aprovechar para hacernos mejores personas, y que esa persona en las que nos estamos transformando nos llevará a conocer a una mejor persona (para nosotros) ó conseguir un mejor trabajo.

Aprender a entender que el dolor es pasajero y que siempre tiene un mejor fin es parte importante de aprender a vivir felices. La confianza y la fe son nuestros mejores amigos en este tema.

miércoles, 1 de julio de 2009

Cuando Piensas que lo que te hace feliz hace infeliz a otros

En el camino de cubrir mis necesidades ( y aunque mi padre diga que estudiar fuera, vivir sola y conocer el mundo no es una necesidad, para mi lo era) tuve que hacerme muchas veces la pregunta: ¿ porque mi felicidad hace infelices a las personas que quiero? Muchas veces me sentí egoísta en solo pensar en mí y no pensar en mi pobre madre y padre que me iban a extrañar mucho.

Hoy, después de varios años de contradicción con mi familia y al sentirme realizada profesionalmente veo a mis padres mas felices que nunca. Eso es porque yo me reflejo en ellos.

El señor SN Goinka, un maestro de meditación Vipassana, dice en un escrito publicado en www.dhamma.org que cuando uno es miserable no nos quedamos con esa infelicidad para nosotros mismos, sino la repartimos y la irradiamos, lo cual quiere decir que los seres humanos no somos nada egoístas con nuestra infelicidad, si nosotros la tenemos, queremos que todos a nuestro alrededor también sean infelices.

Así como la infelicidad se transmite, también se transmite la felicidad. Recordemos que podemos ser felices en cualquier entorno, pero si hay una razón por la cual estamos en este mundo y el camino se nos manifiesta como sueños o necesidades que sentimos. No dejemos que las personas que nos quieren nos impidan seguir nuestro camino, ellos también saldrán beneficiados de nuestros logros y esto también será un aprendizaje para ellos.

Es importante ser pacientes con aquellas personas que dicen ser si decidimos perseguir una necesidad o un sueño. Ellos probablemente piensan que lo mejor para nosotros es otro camino, querámoslos y entendámoslos ya que lo hacen con todo el amor que nos tienen.

Cuando el camino que recorremos lo recorremos con amor, es casi imposible lastimar a alguien.